El auto cuidado, como su nombre lo indica, aplica a todas aquellas actividades que desarrolles para tu propio bienestar.
Estar bien es posible cuando aprendes a conocerte y aceptarte:
- Cómo es tu cuerpo y cómo se comporta
- Cuáles son tus gustos y necesidades
- Qué te relaja y qué te estresa
- Los alimentos que te benefician y los que te hacen sentir mal
- Qué disfrutas hacer y qué no
Este auto conocimiento no se logra en un día sino con una práctica constante de escucha activa hacia adentro. Cada día, las respuestas a esas preguntas puede ser diferentes. Nuestro cuerpo y mente son maravillosos y eso que, según los expertos, solo usamos un poco de nuestra capacidad.
Hoy te invito a estar presente y pendiente de todo lo que hagas, comas y pienses.
Prácticas útiles de auto cuidado, parte 1
1. Tiempo para ti
Lo más importante es que te dediques tiempo todos los días… sí, todos los días…
Te sugiero escoger 5 minutos ya sea al levantarte o antes de irte a dormir e ir aumentando el tiempo gradualmente.
Puedes probar ambos horarios hasta decidir cuál es el que te funciona mejor.
2. Actividades que te reanimen o relajen
Hay muchas actividades que puedes realizar dependiendo de la hora del día que escojas para ti.
De día:
- Medita. En internet y redes hay excelentes opciones con las que puedes comenzar esta práctica. Lograrás enfoque durante tu día. Aquí te dejo un link con una meditación guiada de 3 Yoga Panamá.
- Haz ejercicio. A tu ritmo y escuchando a tu cuerpo. Las rutinas de ejercicios no deben ser igual para todos; mas bien, debes adaptarlos según tu condición física.
- Toma un buen baño. Actívate con una ducha fresca, lava tu cabello, exfolia tu piel con aromas cítricos energizantes y realiza tu rutina de cuidado diaria. A mí me gusta poner música, ¡es un bono extra!
De noche:
- Escucha música. Esto lo puedes hacer a cualquier hora y de acuerdo al mood que tengas.
- Lee un libro. Puede ser de auto crecimiento, aventuras, romance o lo que sea que disfrutes.
- Dibuja, cose o pinta. Haz lo que te guste o provoque.
- Escribe. Lleva un diario, haz poesía o bien comienza a escribir tu propio libro.
- Date un masaje de pies. Esto es ideal para antes de acostarse porque te ayuda a tener un sueño delicioso y reparador. Además, te recomiendo exfoliarlos primero con Peppermint Foot Scrub, sin duda ¡me lo agradecerás!
- Medita. Si lo haces de noche, alcanzarás un nivel de relajación que te ayudará a descansar mejor.
3. Cuida lo que comes
Tu alimentación física es tan importante como tu alimentación mental; por eso, debes escoger sabiamente lo que comes.
Presta atención a tus comidas y bebidas durante 15 días, si te es posible anótalas y registra también aquello que te hizo sentir fatigado, con hambre excesiva, sueño, malestar, dolor de cabeza, o cualquier otra reacción fuera de lo usual.
Este es el primer paso de la escucha activa.
Yo, por ejemplo, cuando como carne roja me siento con fatiga y dolor en la boca del estómago… así que para mí ese es un NO definitivo.
Cada cuerpo reacciona diferente a lo que escucha, lee o come y nuestro estilo de vida es una consecuencia de todo lo que hacemos a diario.
Si quieres tener un estilo de vida saludable, entonces comienza por cuidarte. ¡Tú cuerpo y mente son tu bienes más valiosos!
Checa el enlace a la parte 2.